Esta casa de vacaciones de madera está situada al borde de un bosque, a 16 km de Colmar.

La casa, muy funcional y bien equipada, tiene aire acondicionado y dos terrazas, una de ellas en el tejado.

A través de los grandes ventanales se ve el bosque y al atardecer se pueden observar animales desde las habitaciones.

La ubicación es perfecta para los amantes de la naturaleza, que podrán disfrutar de numerosas y hermosas excursiones y experiencias en la naturaleza en las cercanías.

Aproveche para visitar los pueblos de Trois-Épis (2,5 km) y Labaroche (4,5 km).

Los amantes del golf pueden practicar su afición en el Golf d'Ammerschwihr (8 km).

Colmar es un destino romántico.

Además de su casco antiguo y el Museo Unterlinden, el barrio de Krutenau (La Petite Venise o Pequeña Venecia en francés), con sus casas de entramado de madera y sus pequeños puentes antiguos, es también toda una experiencia.

Visite el pintoresco pueblo de Kaysersberg (12 km) y el Hohkönigsburg (33 km) y en Kintzheim (30 km) un observatorio de águilas y un parque de monos.

Las delicias de la gastronomía local incluyen vino y muchos tipos de queso, así como tarte flambée, Münsterkäsetarte y tarta de arándanos.