Casas rurales en Piornal

¿Estás planeando una escapada de fin de semana a Piornal para disfrutar del paisaje y hacer actividades de turismo activo? Holidu te lo pone muy fácil. En la zona encontrarás una amplia variedad de casas rurales, situadas tanto en el propio pueblo como en las cercanas localidades de Pasarón de la Vera, Navaconcejo, Rebollar, Barrado o Cabrero. Destinos también con mucho encanto que se encuentran rodeados de los preciosos parajes del Valle del Jerte. ¿A qué esperas para reservar tu casa rural en Piornal?

La mayor parte de las casas rurales de Piornal disponen de espacio para 4, 6, 8 y 10 plazas, lo que las hace ideales tanto para pasar unos días tanto en familia como con un grupo de amigos. Y si tu perro viene con vosotros, también será bienvenido, ya que muchos alquileres permiten mascotas. Magníficas construcciones de arquitectura tradicional con interiores muy acogedores que te harán sentir como en casa. Casi siempre con chimenea para caldear la casa en invierno. Pero además, casi todas cuentan con aparcamiento privado y con jardín con barbacoa. Algunas incluso con piscina propia. ¡No esperes más para reservar tu casa rural en Piornal!

Piornal se encuentra enmarcada por el Valle del Jerte, uno de los destinos de naturaleza y descanso más populares de Extremadura. Una preciosa región que destaca por su privilegiado entorno natural, con lugares tan espectaculares como la Garganta de los Infiernos, la Garganta de las Nogaledas, la Cascada del Caozo o la Ruta de los Castaños Milenarios. Por eso, si estás buscando un destino para disfrutar de paisajes únicos, no dudes en reservar una casa rural en Piornal para el próximo fin de semana.

Piornal es uno de los pueblos del Valle del Jerte que mejor sigue conservando su arquitectura típica serrana. Con viviendas de fachadas austeras que se ajustan al clima de la zona y reforzadas con sillares de granito y plaza con fuentes de piedra. Además, en algunas calles es posible ver correr el agua por medio del enrollado. Y, por si esto fuera poco, ofrece unas vistas impresionantes del Valle del Jerte, la Vera y su sierra. ¡Reserva ya tu casa rural en Piornal y ven a conocerlo!

La piscina natural de Las Pilatillas es una garganta que nace en la sierra y que va dejando pequeños charcos en los que es posible disfrutar de un refrescante chapuzón en los meses de verano en medio de un paisaje realmente bucólico. Un lugar ideal para pasar una relajada jornada en familia.

Situada en la carretera que conecta Piornal con Pasarón de la Vera, la Cascada de la Desesperá es un precioso lugar para refrescarse y nadar, pero también para relajarse y dar un paseo por los preciosos parajes de los alrededores. Además, es más tranquila que otras de la zona, por lo que es ideal para echarse fotos.

Emplazado a la entrada del pueblo, el Mirador del Balcón del Valle es uno de los más impresionantes de toda la región, ofreciendo una panorámica increíble del embalse del Jerte y de la parte baja del Valle. No en vano, Piornal es el pueblo más alto de toda la comarca.

Se trata de un precioso recorrido de unos 14,5 km que tarda en completarse unas 6 horas aproximadamente y que no entraña ninguna dificultad. Un precioso itinerario que discurre entre los hermosos paisajes de los Montes de Tormantos, entre frondosos bosques de robles y cerezos.

Ubicada entre Valdastillas y Piornal, la Cascada del Caozo es un entorno realmente mágico rodeado de un exuberante bosque de fresnos, robles y alisos. Un impresionante salto de agua que se precipita a unos 30 metros de altura que se ha convertido en uno de los principales atractivos naturales de todo el Valle del Jerte.

Dedicado a la famosa fiesta de las Jarramplas, declarada de Interés Turístico Nacional, el Museo de Jarramplas ofrece un fascinante recorrido interactivo que permite al visitante ir descubriendo la fiesta, sus momentos más importantes, sus músicas y ver una importante colección de objetos relacionados con ella.

Se trata de un proyecto que comenzó en el año 2012 y que consiste en embellecer las fachadas de las casas del pueblo que, con el objetivo de protegerlas del duro invierno, se encuentran recubiertas de chapa. De este modo, la uralita se convierte en un lienzo gigante donde se exhiben motivos propios del pueblo y del entorno.