Hostales y B&B en Ávila

Los B&B y hostales de Ávila son una magnífica opción para disfrutar de una escapada de fin de semana en el caso de que el viajero disponga de un presupuesto más ajustado, pero no quiera renunciar a alojarse en el centro. En Holidu encontrarás numerosos establecimientos de este tipo dentro del casco antiguo, muy cerca de la Catedral de Ávila y de la Puerta del Alcázar, rodeados de las famosas murallas. No obstante, también encontrarás algunos B&B a las afueras de Ávila, cerca de la estación de tren y del Parque San Antonio.

Los B&B y hostales de Ávila generalmente ofrecen habitaciones dobles, por lo que son muy populares entre parejas y grupos de amigos que quieren disfrutar de una breve estancia en la ciudad. Pudiendo encontrar opciones tanto con baño privado como compartido en función del establecimiento y del precio por noche. Pero además, es habitual que cuenten con calefacción, limpieza diaria y conexión WiFi gratuita. Incluso algunos disponen de servicios extra como terraza o aparcamiento para dejar el coche. ¿A qué esperas para reservar tu B&B en Ávila?

Considerada como una de las ciudades más bellas y antiguas de España, Ávila es una encantadora localidad medieval que atesora un impresionante patrimonio artístico e histórico, lo que hace las delicias de aquellos viajeros que disfrutan haciendo visitas culturales. Si es tu caso, no dudes en reservar un hostal en Ávila para el próximo fin de semana. La Catedral, el Convento de Santa Teresa, las murallas, la Basílica de San Vicente, el Monasterio de la Encarnación, el Real Monasterio de Santo Tomás o el Palacio de la Velada son sólo algunos de los lugares que no puedes perderte.

Otro de los grandes reclamos turísticos de la ciudad es su exquisita gastronomía tradicional, capaz de satisfacer incluso a los paladares más exigentes. El chuletón de Ávila, famoso en toda España, es el plato más representativo, destacando por su ternura y su intenso sabor. Pero tampoco puedes dejar de probar las patatas revolconas, la sopa castellana, los judiones del Barco de Ávila, el cocido morañego, los garbanzos de La Moraña y las yemas de Santa Teresa. ¡Reserva ya tu B&B en Ávila y ven a darte un auténtico festín!

La muralla de Ávila se ha convertido en el mayor icono de la ciudad. Construida a finales del siglo XI, su objetivo era convertirse en un cinturón fortificado ante la presencia de invasores musulmanes que incluyera también a las ciudades de Segovia y Salamanca. Actualmente es una de las murallas medievales mejor conservadas del mundo.

Erigida entre los siglos XI y XIV, la Catedral de Ávila fue diseñada para servir tanto de templo como de fortaleza. Está considerada como la catedral gótica más antigua de España y destaca por el Portal de los Apóstoles, sus bellísimas vidrieras, la sillería del coro y su magnífico retablo.

Si disfrutas visitando museos, te recomendamos que no te pierdas el de Ávila. Un fascinante recorrido por la historia de esta villa que se convirtió en una de las ciudades más importantes de España y por las formas de vida de los lugareños durante el Siglo de Oro. Con interesantes colecciones de trajes típicos, artículos domésticos y herramientas del campo.

Los Cuatro Postes es un impresionante edificio compuesto por cuatro columnas dóricas de cinco metros que enmarcan una enorme cruz de granito. Pensada como punto de parada de los peregrinos a la ermita de San Leonardo. Sin duda, uno de los lugares con mejores vistas del casco antiguo de la ciudad, las murallas y el entorno natural que la rodea.

En la Edad Media, Ávila albergaba una de las comunidades judías más grandes e influyentes de España. Paseando por el antiguo barrio judío, entre sus estrechas callejuielas empedradas y recoletas plazas, podrás descubrir el legado del pasado, siendo las calles Andrín, Reyes Católicos y Zapateros las más bonitas.

Santa Teresa de Jesús fue una de las personalidades más importantes de Ávila. Todavía es posible ver el convento de carmelitas descalzas fundado en 1636 que lleva su nombre. En su interior se encuentra la habitación en la que nació, convertida en una capilla barroca profusamente decorada. Pero también podrás ver el museo y la sala de reliquias.

El Monasterio de Santo Tomás se encuentra fuera de las murallas de la ciudad, en un entorno tranquilo. Fundado a finales del siglo XV, fue usado como residencia de verano de los Reyes Católicos. Llama la atención por su impresionante altar mayor y por sus tres bellos claustros.