Hostales y B&B en Lisboa

¿Has encontrado un vuelo muy económico para visitar Lisboa en tus próximas vacaciones y ya sólo te falta el alojamiento? No busques más. En Holidu encontrarás una amplia variedad de hostales y B&B muy baratos para que puedas disfrutar de una cómoda estancia sin tener que salirte del precio que tenías pensado. La mayor parte de ellos ubicados en el centro de la ciudad, muy cerca de la Sé de Lisboa, del Castelo de S. Jorge y de la Praça do Comércio. Pero también encontrarás algunas opciones en los barrios de Santa Cruz y Campo Requeno. ¿Has decidido ya en qué zona vas a reservar tu hostal en Lisboa?

Los hostales y B&B de Lisboa son ideales para parejas y grupos de amigos jóvenes que quieran disfrutar de una estancia económica en la ciudad pero sin renunciar a la comodidad. La mayor parte de los establecimientos cuentan con habitaciones dobles, tanto con baño privado como compartido. Todas ellas muy bien decoradas y equipadas con televisión e Internet Wi-Fi. Pero además, algunas incluyen balcón o una pequeña terraza para disfrutar del buen tiempo y desayuno incluido en el precio. En cuanto a las zonas comunes, hay algunos hostales en Lisboa de mayor categoría que incluso cuentan con piscina o terraza con vistas.

Lisboa es una ciudad con muchos siglos de historia, lo que ha quedado reflejado en su gran riqueza monumental. Con lo cual, si eres un gran amante del arte y la historia, no dudes en reservar un hostal en Lisboa para tus próximas vacaciones. El Castillo de San Jorge, la Catedral da Sé, el Monasterio de los Jerónimos, la Torre de Belém, el Panteón Nacional o el Convento do Carmo son sólo algunos de los sitios que no debes perderte.

Lisboa es una de las mejores capitales de Europa para salir de fiesta, donde podrás disfrutar de una amplia variedad de ambientes para todos los gustos. Desde bares tranquilos para tomar una cerveza charlando con amigos a animadas discotecas para bailar al ritmo de los temas del momento. Barrio Alto es una de las mejores zonas para empezar la noche. Pero la zona de Santos, las terrazas de las Docas o el Parque de las Naciones también son buenas opciones. ¿A qué esperas para reservar tu B&B en Lisboa?

Un barrio auténtico y sin pretensiones que permite al viajero sumergirse de lleno en la esencia más pura de la ciudad. Lleno de tesoros ocultos y rincones por los que merece la pena perderse. Uno de los barrios más tradicionales y más fotogénicos de la ciudad, donde además tendrás la oportunidad de disfrutar del típico fado.

Los miradores de Lisboa son parte fundamental del encanto de la capital portuguesa, por lo que es una obligación visitar varios de ellos. El Mirador de Graça, el da Senhora do Monte, el de Santa Lucía, el de Santo Estêvão, el de San Pedro de Alcântara, el de Cais das Colunas, el del Castillo de Lisboa, el del Parque Eduardo VII, el de Portas do Sol y el de los Montes Claros son sólo algunos de los más destacados.

La zona de Chiado fue el epicentro del Romanticismo Portugués en el pasado, por lo que tradicionalmente ha sido un importante punto de encuentro de artistas y escritores. Actualmente, es una de las zonas más animadas de Lisboa, llena de cafeterías y tiendas, y siempre llena de gente.

El Elevador de Santa Justa, que conecta la Baixa Lisboeta con la zona de Chiado, es uno de los pocos elementos góticos que se conservan en Lisboa. Construido por el ingeniero portugués Raúl Mesnier de Ponsard, quien se dice que fue discípulo de Eiffel. Desde arriba podrás disfrutar de uno de los paisajes más bellos de la ciudad.

El tranvía es una de las mejores opciones para desplazarse por las estrechas calles de los barrios antiguos de Lisboa. El más famoso es el tranvía 28, que pasa por el Bairro Alto, Alfama, Chiado, Graça y Jardim da Estrela. Conserva su apariencia original desde hace más de un siglo.

La Plaza del Comercio es el sitio en el que se encontraba situado el antiguo Palacio Real hasta el terremoto del siglo XVIII. Una enorme explanada peatonal a orillas del Tajo que es el eje de las redes de transporte de la ciudad, donde confluyen las principales líneas de comunicación de la ciudad.

Los pasteles de Belém fueron inventados en 1837 en el barrio de Belém, por el que reciben su nombre. El mejor sitio para probarlos es en la pastelería que se ubica junto al Monasterio de los Jerónimos, donde se siguen elaborando con la misma receta secreta desde hace dos siglos.