Normativas de seguridad y mantenimiento de piscinas para alquileres vacacionales

Contar con una piscina privada, de máxima seguridad, en tu vivienda vacacional es un valor añadido para atraer huéspedes y fidelizarlos.

magazine_image
  • Las piscinas vacacionales requieren cumplir con normativa de seguridad y mantenimiento según el Real Decreto 742/2013.
  • Anfitriones deben comunicar la apertura de la piscina y proporcionar a huéspedes información sobre su uso seguro.
  • Infraestructuras deben incluir dispositivos de seguridad como barreras, cobertores, alarmas o cubiertas.
  • Mantenimiento regular y cumplimiento de normas técnico-sanitarias son cruciales para seguridad.
  • Propietarios deben asegurarse de cumplir regulaciones locales específicas para cada comunidad autónoma.

 

Febrero 2025

 

Disponer de una piscina en una vivienda es un atractivo que genera un mayor número de oportunidades para alquilar tu casa de vacaciones. Los huéspedes valoran la comodidad de poder darse un baño con el que combatir las altas temperaturas y es una ventaja en la temporada de primavera y verano. A la hora de anunciar una vivienda vacacional este es un factor diferencial en la toma de decisiones. Por ello, los anfitriones suelen realizar fotografías panorámicas de la piscina para promocionarla en un portal o una página web de alquiler vacacional, y se aseguran de que las instantáneas figuren en primer plano. Pero igual que contribuyen positivamente a atraer huéspedes, las piscinas conllevan obligaciones en términos de mantenimiento y seguridad

En el ámbito de los alquileres vacacionales, estas obligaciones dependen del tipo de piscina: piscinas privadas de uso comunitario, donde diferentes pisos o casas comparten la piscina; o piscinas privadas unifamiliares, de uso particular por parte de los huéspedes de una sola casa o piso de vacaciones. Ambas normativas están recogidas en el Real Decreto 742/2013, que establece que los responsables de garantizar la seguridad y salubridad de una piscina son los titulares de la misma. Para cumplir todos los requisitos tendrás que atender a tres dimensiones fundamentales: el acceso a la información, la calidad de las infraestructuras y el mantenimiento técnico-sanitario. A continuación, detallamos cada aspecto en profundidad.

 

La información en las normativas de seguridad para piscinas

Tener una piscina implica la obligación de transmitir información sobre la misma, tanto a los huéspedes como a las instituciones locales. Los anfitriones de la vivienda, según estipula la normativa de piscinas de alquiler vacacional, deberán comunicar la apertura de la piscina a las autoridades competentes, así como registrar datos sobre su autocontrol e incidencias a nivel digital. 

Además, tienen una responsabilidad de cara a la comunidad de huéspedes que van a hacer uso y disfrute de ella. Así, los anfitriones deberán poner a disposición de los huéspedes lo siguiente: 

  • Información sobre los controles técnicos realizados, así como de los productos utilizados para su mantenimiento.
  • Material divulgativo para prevenir riesgos relacionados con la salud, lo que incluye señales de advertencia sobre las singularidades de la piscina. Suelen comunicarse aspectos sobre cómo actuar en caso de una indigestión o accidente, la composición de un botiquín o la profundidad en cada zona de la piscina.  
  • Información sobre la existencia o no de socorristas y de los centros sanitarios más cercanos. Se suele recurrir a socorristas en piscinas muy amplias que congregan a una gran cantidad de personas.
  • Normas, derechos y deberes del usuario/a sobre la piscina. Mientras que el huésped debe cumplir con el reglamento, el anfitrión cederá el derecho de uso sobre la piscina durante el tiempo pactado en el alquiler.  
relax piscina

Sobre las infraestructuras y dispositivos de seguridad

La seguridad de las piscinas de alquiler vacacional depende, en buena medida, de sus instalaciones. Por eso, las autoridades competentes han creado un marco legal para que su construcción garantice el buen uso por parte de las personas. En lo que concierne a su infraestructura, tanto las piscinas privadas de uso individual o colectivo, como las piscinas familiares y las piscinas de alquileres vacacionales tienen la obligación de equiparse con uno de los siguientes dispositivos:

  • Barreras de protección. Se instalan o construyen con el objetivo de que los niños menores de cinco años no accedan a la piscina si no es con supervisión de un adulto. Estas barreras circundan radialmente la piscina y deberán resistir las acciones de un niño y garantizar el bloqueo del acceso.

  • Cobertores. Han de impedir la inmersión involuntaria de niños menores de cinco años y resistir el paso de una persona adulta. Se trata, generalmente, de una lona o material flexible que protege de la suciedad, generalmente fácil de instalar y de retirar.

  • Alarmas. Deben instalarse de modo que no pueda ser activada o desactivada por niños menores de cinco años y disponer de una sirena que garantice su eficacia y avise a los responsables del uso de la piscina.
  • Cubiertas. De la misma manera que en los casos anteriores, debe resultar inaccesible para niños menores de cinco años. Por lo general, se trata de una estructura más sólida que los cobertores y está fabricada en vidrio, aluminio o policarbonato.  

Mantenimiento de piscinas de alquiler vacacional

En Holidu ya realizamos una breve guía de mantenimiento de piscinas de alquiler vacacional en la que se destacaban tres aspectos fundamentales para garantizar que la piscina esté siempre en óptimas condiciones de uso: limpieza regular, revisión de equipos, control de niveles de pH y cloro. Del mismo modo, proporcionamos consejos adaptados a cada estación del año y un desglose del equipamiento que sirve para mantener una piscina de alquiler vacacional siempre a punto. 

La normativa técnico-sanitaria que alude a las piscinas indica que los productos desinfectantes deberán cumplir lo publicado en el decreto R.D.1054/2002, mientras que el personal dedicado al mantenimiento y desinfección del agua tendrá que contar con la titulación que lo capacita para ello. El agua, además, cumplirá criterios específicos de calidad y deberá estar al menos filtrada y desinfectada antes de entrar en el vaso. El vaso es como se conoce en términos técnicos al volumen de agua con el que se llena la piscina. Asimismo, los tratamientos químicos no se realizarán directamente en el vaso, sino que el agua deberá tratarse previamente y después aplicar su tratamiento in situ. 

Adaptarse a las regulaciones locales

Un aspecto importante a tener en cuenta es que los propietarios han de asegurarse de cumplir con las regulaciones locales, y esta normativa varía dependiendo de la comunidad autónoma en la que se encuentre el alquiler vacacional. Aunque existen reglas estatales que alinea a las comunidades en cuestiones de seguridad, hay particularidades que atender en cada comunidad. Nuestro consejo es que leas atentamente los decretos que rigen la normativa de piscinas de la zona donde se ubica tu vivienda vacacional y adaptes la piscina de forma conveniente. Para informarte mejor, puedes dirigirte al ayuntamiento de tu ciudad o solicitarlo vía telemática, aunque la mayoría de información es pública y está presente en Internet.  

Como has podido comprobar, poner en funcionamiento el alquiler de una casa de vacaciones con piscina exige adaptarse a un marco legal exigente. Y es que los accidentes en piscinas son, por desgracia, habituales en España. Garantizar la seguridad es absolutamente necesario para que los huéspedes hagan un buen uso de la piscina. Los anfitriones que ponen esmero en cuidar este factor diferencial de su vivienda transmiten profesionalidad a sus huéspedes y consiguen fidelizarlos. Ahora ya sabes cómo ser uno de ellos.

Otros posts en esta categoría:

No te pierdas nuestras recomendaciones de viaje, descuentos de última hora y otras increíbles ofertas en casas de vacaciones.
Al registrarte, aceptas nuestras Términos y Condiciones y nuestra Política de Privacidad. Recibirás ofertas de Holidu.