Cambios del Nuevo Decreto de Viviendas Turísticas en la Comunidad Valenciana

Enero 2025

La Comunidad Valenciana es una de las comunidades autónomas que más viajeros reciben en España. Los datos hablan por sí solos: más de 9 millones de turistas internacionales desembarcan cada año en estas tierras; y si le añadimos el turismo nacional, la cifra bien podría llegar hasta los 20 millones de personas. Con estos datos, la necesidad de regulación de los alquileres turísticos es más que evidente. Es preciso equilibrar los beneficios turísticos con las sensibilidades patrimoniales, ambientales y de convivencia. Te explicamos los cambios de la ley del alquiler vacacional en la Comunidad Valenciana.

El Gobierno Central asume amplias competencias en cuanto a turismo se refiere, pero también es cierto que ha derivado muchas de ellas a las comunidades autónomas y los ayuntamientos para que legislen según el criterio de los habitantes de la zona. Te explicamos en este artículo qué ha cambiado a rasgos generales con el nuevo decreto ley recientemente aprobado por la Generalitat Valenciana que ya ha entrado en vigor.

El límite del alquiler de la vivienda vacacional queda fijado en diez días

Empecemos por lo más básico; el decreto de viviendas de uso turístico de la Comunidad Valenciana establece que, para ser consideradas viviendas turísticas, el tiempo de las estancias debe ser inferior o igual a diez días. Hablamos siempre de formalizar un solo contrato entre un mismo huésped y un mismo anfitrión. ¿Por qué establecer este tope? Muy sencillo: para diferenciar las viviendas de uso turístico de los alquileres de corta estancia, pues estos últimos se rigen principalmente por la normativa estatal. 

Para que una vivienda se considere turística debe pasar la evaluación de los técnicos municipales, y que estos emitan un informe de compatibilidad urbanística que la clasifique como apta para el alquiler vacacional.

No se puede alquilar la vivienda por habitaciones

El nuevo decreto apuesta por mantener el epígrafe que prohíbe dividir el alquiler por habitaciones como si de un hotel se tratase. Esta es una de las medidas adoptadas para evitar el desborde de huéspedes y la aglomeración urbana, y también para brindar un mejor servicio, más personalizado, a los huéspedes.

Referencia catastral única por cada inmueble

Todas las viviendas turísticas que se inscriban en el registro deben disponer de una referencia catastral individual, única e intransferible, que, por cierto, debe incluirse en el contrato de arrendamiento. 

El visto bueno de la comunidad de propietarios

Una de sus medidas estrella de la nueva ley de la vivienda en la Comunidad Valenciana consiste en la exigencia de que para operar con una vivienda con fines turísticos, el propietario debe conseguir un certificado de la comunidad de vecinos que le dé el visto bueno a su actividad. Se intenta así mejorar la convivencia y frenar aquellos alquileres vacacionales que regentan empresas de un modo impersonal. Por cierto, se trata de una medida que se ha visto reforzada desde la propia judicatura. 

La publicidad de la vivienda debe ser clara y transparente

Los cambios también han llegado al terreno de la promoción de la vivienda vacacional. Según recoge el nuevo decreto del alquiler de viviendas, la publicidad de cada inmueble ha de mostrar la localización exacta y el pertinente número de inscripción en el registro de la Comunidad Valenciana que debe ser siempre público. Los anuncios de la vivienda no pueden ser velados; han de exhibir transparencia en todo momento. De hecho, es obligatorio colocar en el portal o la entrada a la vivienda el logotipo turístico de la Comunidad Valenciana que se puede encontrar en la web oficial de la Generalitat.  

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Obligación de renovar la inscripción en registro autonómico cada lustro

Aquellas viviendas con fines turísticos han de formar parte del Registro de Turismo de la Comunitat Valenciana. Allí se les asignará un número de inscripción, esencial para poder arrendar la vivienda con fines lucrativos. Dicha inscripción debe renovarse cada 5 años. En el caso de que el propietario ya contase con una inscripción anterior al decreto ley, esta tendrá validez hasta el 8 de agosto del 2029, momento en el cual deberá volver a formalizar su inscripción a partir del nuevo decreto.

Entre los requisitos exigidos para la incorporación al registro o, en su defecto, para la renovación de la licencia, es preciso entregar una declaración responsable que compromete al propietario a cumplir con la normativa vigente en el periodo de 5 años en el que se explote la vivienda. También es obligatorio disponer de un informe municipal de compatibilidad urbanística expedido por el área municipal pertinente y que incluya la firma de los técnicos de urbanismo.

Se ceden varias competencias a los ayuntamientos

La Generalitat ha querido contar con la participación de los ayuntamientos en la toma de decisiones. Por eso ha delegado la competencia de ciertas limitaciones y/o restricciones. Por ejemplo, las entidades locales pueden dictar su propia normativa respecto al número máximo de viviendas que pueden existir en cada bloque o manzana, dentro de un principio de proporcionalidad. También corresponde a los ayuntamientos establecer un control y vigilancia sobre las viviendas con fines turísticos dentro de su territorio. Dichos ayuntamientos tienen carta blanca para establecer sanciones si registran infracciones leves y/o graves.

Cómo afectan estos cambios a los propietarios de alquileres vacacionales

Los propietarios y anfitriones tendrán que revisar sus licencias y actualizarlas si fuera oportuno, y prestar atención a muchos de los cambios aquí mencionados para adaptarse a la nueva normativa. Objetivamente, la nueva regulación es mucho más estricta, pero esto no debe ser considerado como negativo. 

Estas exigencias están orientadas a que los propietarios eleven la calidad de sus alquileres vacacionales y que la Comunidad Valenciana obtenga mejor reputación (aún) entre sus visitantes. Además, de este modo se lleva a cabo una criba con aquellas viviendas que incumplen el nuevo decreto; eliminar competencia de escasa calidad turística es ahora posible con la nueva normativa. Los inquilinos y las comunidades locales saldrán claramente beneficiados con esta ley. 

Cómo adaptarse a estas reglas para evitar sanciones

Como citamos anteriormente, se convertirá en una obligación mantenernos al día de la normativa. Tendremos que consultar las fuentes oficiales y, si fuera necesario, contactar con el área turística de la Generalitat o del ayuntamiento de turno. A su vez, tendremos que comprobar cada cierto tiempo nuestros sistemas y equipos de seguridad, y reforzar los sistemas de prevención.

Por otro lado, es recomendable llevar la contabilidad y la burocracia de un modo estricto y detallado: la declaración de los ingresos, el pago de las correspondientes tasas, la recopilación de facturas de todo tipo, etc. En caso de inspección, vamos a necesitar mostrarnos serios y diligentes. Y, si por casualidad no pudiéramos afrontar una tarea tan ardua, siempre podemos contratar unos servicios contables o de consultoría especializada que nos alivie la carga de trabajo. 

Resumiendo, la Comunidad Valenciana es una tierra enormemente peculiar desde el punto de vista turístico, pues recibe una cantidad ingente de visitantes cada año. Por lo tanto, necesita una regulación específica adaptada a sus circunstancias. Es por ello que Holidu te ha desgranado las claves de la nueva normativa que afectan a las viviendas de uso turístico en la Comunidad Valenciana. Puedes consultar más consejos para propietarios, anfitriones y coanfitriones en el magazine de Holidu. 

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